Carta a mi "amigo"

Soy una sobreviviente de agresión sexual. Tenía 14 años, vestía una camisa blanca y jeans claros. Él era mi "amigo". Estaba en la escuela, era un día de manifestación y el almuerzo era más largo. Estaba en la escuela y él me había invitado a almorzar. Era mayor que yo y tenía auto. Habíamos sido amigos durante años. Empecé a notar que iba en la dirección equivocada y había estacionado el auto en un lugar abandonado. Entonces recuerdo sentir su mano tocándome el muslo mientras seguía subiendo. Dijo "Cállate tú me provocas". Le dije que parara y me tapó la boca con la mano para callarme. Sentí asco y no podía creer que mi propio "amigo" hiciera eso. Me sentía culpable de que mi mamá se enojara conmigo por subir al auto con un chico que creía mi amigo. Él me decía que si se lo decía a la gente, nadie me creería. Luego me dejó en la escuela como si nada hubiera pasado. Llegué tarde a clase, no podía caminar y estaba temblando. Fui directo al baño y lloré. Quería arrancarme la piel y tenía miedo de que volviera. Una vez que iba a clase, me encontré con una amiga. Me preguntaron si estaba bien porque me vieron temblando. Quería decirles que no, pero solo oía su voz en mi cabeza: "Nadien te va a creer". Pasé el resto del día escondiéndome de él. Me había escrito por Instagram y recuerdo haberlo bloqueado. Un par de días después, una amiga me vio y se rió. Hice todo lo posible por evitarlo, estaba asustada y paranoica. Entonces se me acercó y me preguntó por qué lo había bloqueado. No podía articular palabra. Empecé a faltar a clase y a esconderme en los baños, dejé de comer y no salía a comer con mis amigas; simplemente decía que no tenía hambre. Mi prima empezó a preguntarse por qué no salía con ellas. Se lo conté y me abrazó y me ayudaba a esconderme cuando él estaba cerca. Luego se lo conté a una amiga, pero simplemente le restaron importancia y se rieron. Tenía una clase de último periodo donde nos ayudaban con la tarea; sus amigos y él estaban en la misma clase que yo. Dejé de ir por un tiempo y luego le pregunté al profesor si podía hacer mi tarea en la trastienda. Él me controlaba. Tuve problemas con futuras relaciones, empecé a tener problemas en casa y en la escuela. No dejaba que nadie me tocara, perdí amigos y empecé a cubrirme más. Entonces entendí por qué de pequeña siempre me decían que me cubriera. Pero solo llevaba una simple camisa blanca y vaqueros. Todavía me cuestiono y no dejo que mucha gente entre. Todavía me da miedo volver a verlo. Durante este proceso aprendí a lidiar con mis propios problemas porque a nadie le importaba realmente, me decía a mí misma. Que había problemas más graves en el mundo, eso es lo que él me hizo creer. Es un proceso que aprendes a sanar cada día, sin importar cuánto tiempo haya pasado. Pero no estamos solos y ya no nos silenciarán. Y a mi "amigo": ya no tienes control sobre mí.