terminando mi silencio

Hoy siento mi dolor con más intensidad. En los últimos meses, mi sanación ha sido más suave y, de repente, mi mente se llenó de sentimientos, pensamientos y recuerdos. Por suerte, pude concentrarme en ese momento y hablar con esa parte de mí que desea ser escuchada; le dije que hablaría con ella y que le permitiría compartir y expresarse como quisiera. Continué con mi día y, de repente, estoy pasando tiempo con mi pareja, viendo YouTube, anime, abrazándonos y haciendo tonterías. Iniciamos un momento íntimo cuando, de repente, me sentí muy afectada. Mi cuerpo empezó a recordar experiencias pasadas y rápidamente me cubrí con las sábanas. Empecé a hiperventilar y mi pareja inmediatamente comenzó a consolarme. Sentí mucho miedo en ese momento y vergüenza de haberlo detenido así. No fue culpa de mi pareja ni mía. Aunque todavía me sentía muy mal y culpable. Así es como me sentí y estoy molesta; esa es mi reacción. Estoy aquí para decirme que estoy muy orgullosa de ti. Estoy muy orgullosa de ti por defender tu cuerpo. Estoy muy orgullosa de ti por respetar tus límites. Estoy muy orgullosa de ti por escucharme cuando te pedí que pararas. Estoy muy orgullosa de ti por haber llegado hasta aquí. Y por todos los demás puntos que aún nos quedan. Tu yo de 21 años te lo agradecería; ¡de hecho, ya te lo agradeció! Últimamente he estado pensando mucho en esa versión de mí misma de 21 años. Pienso en todo lo que pasó y tuvo que soportar. Pienso en lo sola que se sintió. En lo doloroso que se sintió. En lo confuso que fue todo. Pienso en ella para recordarle que es amada; y que si no puede sentir el amor de los demás, para recordarle que la amo. La amo tanto y la llevo conmigo todos los días de mi vida. Nunca olvidaré esa versión de mí misma. Nunca olvidaré el dolor que tuve que soportar. Honraré ese dolor por el resto de mi vida. No pasaste por ese dolor en vano; porque ese dolor no nos define en absoluto. No nos define en absoluto. Nuestro amor nos define; ese dolor es un recordatorio de mi amor por ti y de cómo te sostendré en cada instante. Me corté el pelo solo para que no tuvieras que volver a vivir con el pelo que él tocó. Nunca dejaré que te haga daño ni que se acerque a ti. Te protegeré el resto de mi vida porque te amo, porque soy tú. No te avergüences de tener límites y respetarlos, escucha a tu cuerpo y a ti misma. Lo que pensé al principio fue que mi abusador/exnovio también fue la primera persona con la que tuve sexo. Eso también me causó mucho dolor y pena. Me duele mucho darme cuenta de que el sexo con mi ex fue muy doloroso y traumático desde el principio. Merezco tener sexo seguro, consensuado, respetuoso y placentero. Y él ya no puede dictar ese aspecto de mi vida nunca más. Siendo sincera, lo odio muchísimo. Lo odio muchísimo. Siento tanto dolor y angustia, y espero no volver a encontrarlo. Siento tanta rabia. Y también reconocí que toda esa rabia es miedo y tristeza. Me pone increíblemente triste recordar que alguna vez tuvo tanto poder sobre mí. Me pone aún más terriblemente triste darme cuenta de que fui tan inconsciente en esa vida; no me culpo, pero es muy doloroso tener tantos recuerdos dolorosos con una persona con la que salí durante 3 años. Todo esto me pone muy triste. Sé que ya no tiene ese poder sobre mí, pero incluso los recuerdos me persiguen. Y lo que me persigue aún más es la idea de que mi ex probablemente nunca se entere de nada de esto; no sé si sabe que lo que me hizo es agresión, incluso a pesar de decírselo. No tengo ni idea. Me da una profunda angustia saber que probablemente no piensa en absoluto en mi agresión. No tengo ni idea. Puedo anclarme en el hecho de que ahora estoy en una relación amorosa, segura y saludable con mi hermosa pareja. Gracias por abrazarme, gracias por hacerme sentir segura, gracias por tu paciencia, gracias por todo, mi amor. Tu amor me da paz. Equilibra mi alma. Le das amor y seguridad a mi yo de 21 años, y ella no podría agradecerte lo suficiente. Esta actualización fue un poco confusa, pero no podría ser más cruda y auténtica porque es exactamente lo que siento. Si alguien lee esto, gracias por escuchar. Y absolutamente gracias a mí misma por permitirnos expresar nuestras emociones y sentimientos de una manera tan cruda. La sanación es continua y seguirá siéndolo, y eso está bien. El dolor también es parte del proceso de sanación.