¿Aún se considera agresión sexual si nunca me tocaron pero me sentí presionada a tocar sexualmente a la otra persona cuando no quería hacerlo?

Muchas gracias por esta pregunta. Si bien solo tú puedes definir lo que experimentaste, en función de lo que compartiste, esto puede ser sin duda una forma de agresión sexual, incluso si la otra persona no te tocó físicamente. La agresión sexual no se limita al contacto físico. También puede incluir coerción, manipulación o presión para participar en una actividad sexual que no quieres hacer.

Si te sentiste presionada u obligada a tocar a la otra persona cuando no querías hacerlo, eso es una violación de tu consentimiento y de tu autonomía corporal. Es importante entender que el consentimiento debe darse libremente y que si sentiste que no podías decir que no o si te hicieron sentir que le debías a la otra persona contacto sexual, entonces eso no es un consentimiento verdadero.

Es común que las sobrevivientes de una agresión sexual se sientan confundidas, avergonzadas o inseguras sobre lo que les sucedió, especialmente si la agresión no se ajusta a la estrecha definición de lo que la sociedad suele considerar como agresión sexual. Pero es importante reconocer que sus experiencias y sentimientos son válidos y que usted merece apoyo y sanación, sin importar la forma en que haya sido la agresión.

Si tienes dificultades para procesar lo que te sucedió o si estás experimentando síntomas de trauma , como ansiedad, depresión o recuerdos traumáticos, te animo a que busques ayuda. Puedes hablar con un amigo o familiar de confianza, o buscar el apoyo de un terapeuta que se especialice en trabajar con sobrevivientes de traumas sexuales. Recuerda que no estás solo y que no tienes que pasar por todo esto solo.

Se necesita mucho coraje para reconocer lo que te pasó y pedir ayuda, y quiero reafirmar la fortaleza que ya has demostrado al contactarnos. Tus experiencias importan y mereces que te escuchemos, creamos y apoyemos. No estás solo.